Argentina
Por efecto de la inflación, se desplomó el consumo de carne vacuna
El consumo interno de carne vacuna se desploma frente al aumento de los precios en la hacienda y el mostrador, mientras las exportaciones crecen favorecidas por el levantamiento de las restricciones.
El consultor estimó, que los precios actuales de la hacienda que están en torno a los $1.700 a $1.800 el kilo vivo, de un novillito de consumo bueno, y de $1.600 y fracción del Índice de Novillo en Cañuelas, «se van a mantener durante febrero», lo que «implicaría que estaríamos hablando de un precio promedio a la carne de entre $6.000 a 6.500″, que sería una suba de 10% respecto de enero.
El presidente de la Cámara Argentina de Matarifes y Abastecedores (CAMyA), Sergio Pedace, aseguró que «los precios se van a ir afirmando y de a poco van a ir subiendo y acompañando la inflación» y explicó que la suba «ya no depende del consumo interno, porque la gente se ha volcado más al cerdo, que está muy barato, y al pollo, que ya llegó a su techo».
Asimismo, remarcó que «el precio de la carne vacuna va a ir dependiendo del valor del dólar y de la exportación, y de la cantidad de novillos que tenga la Argentina para poder exportar».
Debido a la sequía, agregó que «hay un millón y pico de terneros menos, y menos hembras también» y estimó que «el rodeo se va a ir recomponiendo si hay previsibilidad, dentro de un año y medio o dos, no antes».